En doce meses, las personas extranjeras ocupadas aumentaron 1,4%.
En la estimación del total de la población extranjera, la fuerza de trabajo alcanzó, en doce meses, una variación de 0,7%, menor a la registrada por las personas ocupadas de 1,4%, esta última fue incidida solo por las mujeres (6,5%). En tanto, las personas desocupadas bajaron 7,4%.
Las tasas de participación y de ocupación se situaron en 82,4% y 77,0%, creciendo anualmente 0,8 pp. y 1,2 pp., respectivamente.
Por sector económico, influyeron en el alza de las personas ocupadas comercio (12,9%), hogares como empleadores (25,2%) y construcción (5,9%); mientras que, por categoría ocupacional, el incremento se observó principalmente en personas trabajadoras por cuenta propia (15,8%).
La expansión de la población ocupada en doce meses (1,4%) fue impulsada por las personas con educación secundaria (9,4%) y educación primaria (12,6%); mientras que el principal retroceso se suscitó en educación universitaria (-9,9%).
La tasa de desocupación de las mujeres extranjeras se situó en 7,9%, con una disminución de 1,0 pp. en doce meses; mientras que la de los hombres extranjeros alcanzó un 5,3%, reduciéndose 0,2 pp.
Las tasas de participación, en tanto, se situaron en 75,0% y 90,5%, mientras que las tasas de ocupación se ubicaron en 69,0% y 85,7%, para mujeres y hombres extranjeros, respectivamente.
Informalidad laboral
La tasa de ocupación informal de la población extranjera se situó en 33,1%, con un incremento de 1,2 pp. en doce meses. En las mujeres, la tasa de ocupación informal se ubicó en 35,0% y en los hombres, en 31,5%, con variaciones de 3,0 pp. y -0,4 pp., de forma respectiva.
Las personas extranjeras ocupadas informales aumentaron 5,2%, incididas exclusivamente por mujeres (16,5%).