En su cuarta y última Cuenta Pública ante el Congreso Nacional, el Presidente Gabriel Boric presentó un balance de su gestión, destacando avances en materia de derechos sociales, economía y seguridad, además de reconocer errores y desafíos pendientes para el último año de su mandato.
Durante su discurso, Boric enfatizó la importancia de los acuerdos para mejorar la calidad de vida de los chilenos. Entre los logros mencionados, destacó el pago de la deuda histórica a los profesores, la aprobación de la reforma previsional que aumentará las pensiones, la reducción de la jornada laboral a 40 horas y la implementación del Copago Cero en salud pública. También resaltó la Estrategia Nacional del Litio y el aumento del sueldo mínimo a 539 mil pesos.
En el ámbito de seguridad, el Mandatario reafirmó su compromiso de combatir el delito y promover barrios más seguros. Además, anunció la extensión del Metro de Santiago hasta el Aeropuerto Internacional, la ampliación de la flota de buses eléctricos en regiones y la eliminación del carácter especial de la cárcel de Punta Peuco.
Boric reconoció que su gobierno tuvo un diagnóstico erróneo al inicio de su gestión, subestimando la correlación de fuerzas en el Congreso, lo que obligó a ajustar el rumbo y ampliar alianzas políticas. También hizo un llamado a la unidad y participación ciudadana en las próximas elecciones presidenciales y parlamentarias.
La Cuenta Pública generó diversas reacciones en el espectro político y social. Mientras algunos sectores valoraron los avances en derechos sociales y económicos, otros criticaron la falta de medidas concretas para impulsar el crecimiento y la inversión. Según una encuesta de Cadem, la aprobación del Presidente Boric aumentó cinco puntos tras su discurso, alcanzando un 32%.