En la inauguración del XVIII Congreso Encuentro Chile - Bolivia: Construyendo un futuro común, que tuvo lugar en la Universidad Finis Terrae, el Ministro de Relaciones Exteriores se refirió a los cambios en la relación entre ambos países en el último tiempo.
“Ese es el ánimo que queremos cuidar. Un trato respetuoso, predecible y orientado en resultados concretos para nuestros pueblos”, agregó el ministro, destacando los lazos que se han ido formando en el último tiempo.
En esa misma línea, tuvo palabras para uno de los puntos que más preocupa a la población de ambos países: la situación de seguridad en la frontera. “Existe la oportunidad de seguir afinando la colaboración frente al crimen organizado transnacional, siempre resguardando derechos y facilitando el tránsito legítimo por esos espacios”, afirmó.
El representante de Gobierno destacó el espacio generado dentro de este tipo de congresos: “Lo que se trabaja en estas mesas no se queda en un auditorio, repercute en los pasos fronterizos, en la ventanilla consular, en la empresa que exporta y en la familia que busca mejores horizontes”.
“Valoro que esta sea una iniciativa académica binacional. Esto envía una señal clara. Y es que la integración no se decreta. Se discute, se corrige y se mejora. La investigación rigurosa ilumina mejores decisiones en el ámbito de las políticas públicas”, destacó finalmente el ministro.
Por último, Juan Eduardo Vargas, rector de la U. Finis Terrae, también tuvo palabras para referirse a la importancia de este tipo de encuentros entre países vecinos: “Aquí surgirán proyectos, investigaciones y lazos de cooperación concretos, que se transformarán en un aporte real para la construcción de una relación bilateral, basada en la confianza mutua, el respeto recíproco y la cooperación sostenida, porque esta es la única vía para avanzar hacia un entendimiento profundo y duradero entre Chile y Bolivia”.




